Santo Domingo (AP). El exconsejero legal, ahora fugitivo, de un grupo de estadounidenses que fueron detenidos en Haití bajo acusaciones de secuestro, dijo el martes que fue acusado en Estados Unidos de un caso de tráfico de personas mentras que también pesa sobre él una orden de aprehensión emitida en El Salvador.
Jorge Puello, quien llamó la atención al ofrecer comida, medicinas y asistencia legal a los 10 estadounidenses encarcelados en Haití, ya era perseguido por las autoridades de República Dominicana bajo un pedido de búsqueda de la Interpol surgido desde El Salvador.
La policía salvadoreña dice que el hombre encabezaba una red que atraía a mujeres jóvenes y a niñas para obligarlas a prostituirse. Asimismo, también tiene una orden de arresto pendiente por haber violado su libertad condicional.
Puello, quien asegura ser inocente de todos los cargos que pesan en su contra, reconoció en una entrevista telefónica con la Associated Press que también aparece mencionado en una acusación federal del 2003 emitida en el estado de Vermont que lo acusa de contrabando de inmigrantes ilegales desde Canadá hacia Estados Unidos.
En la acusación se identifica a un hombre de 32 años como Jorge Torres, que vivía en Canadá en ese entonces y pudo evitar ser arrestado. Puello dice que trabajaba como agente encubierto para las autoridades estadounidenses en ese entonces. Las autoridades de seguridad han dicho que aún no han confirmado si Puello es el mismo Torres, pero el caso continúa abierto.
El señor Torres es un fugitivo de Canadá y Estados Unidos ha solicitado su extradición, indicó Tristram Coffin, fiscal federal para Vermont.
“Siempre hemos estado interesados en obtenerlo. Mantenemos la atención en los fugitivos aún cuando huyen”, agregó .
Puello, como se le ha conocido más recientemente, habló con The Associated Press para analizar su caso y dijo que estaba en Panamá preparando su regreso a El Salvador para enfrentar los cargos en su contra en ese país. Su ubicación no pudo ser confirmada.
“El mundo entero sabrá que soy inocente”, agregó Puello.
En tanto, la policía dominicana, en colaboración con la Interpol y las autoridades estadounidenses están interrogando a sus conocidos mientras prosigue la búsqueda del fugitivo.
“Lo estamos cazando”, dijo Steve Blando un vocero del Servicio de Alguaciles en Washington.
Los problemas legales de Puello se han convertido en una distracción para los estadounidenses integrantes de una iglesia bautista que están detenidos y para las personas que intentan conseguir su liberación.
Los misioneros bautistas fueron acusados de intentar llevarse 33 niños de Haití sin autorización luego del terremoto del 12 de enero
Entradas
